Es complicado pensar lo que contar sobre un personaje como Thanos. Aunque su primera aparición no se produjo hasta los 70, posterior a las grandes creaciones de los principios de Marvel, poco a poco fue ganando importancia hasta convertirse en uno de los personajes más relevantes de la parte cósmica de la editorial. Hay otros seres más poderosos que el titán, por supuesto, pero a la hora de la verdad no hay nadie como Thanos.

Es también debido a ese crecimiento en importancia que, como sucede con este tipo de personajes, su origen ha sido revisitado y modificado a lo largo de los años, dando lugar a algunas historias que se contradicen entre sí. Intentemos poner algo de orden para tener las ideas claras.

Uno de los nombres más habituales por los que se conoce a Thanos es como el Titán Loco. El término titán no es una referencia a los seres de la mitología griega, sino que Thanos nació en la luna de Saturno llamada Titán. Allí habitaba una raza derivada de los Eternos de la Tierra. Recordemos que los Eternos son seres inmortales creados por los experimentos de los alienígenas llamados Celestiales. Tras diversas guerras civiles, uno de estos eternos, A’Lars, hermano de Zuras e hijo de Kronos, fue expulsado de la Tierra y se le permitió fundar una colonia en Titán, donde previamente ya habían sido expulsados otros eternos. Allí conoció a la única superviviente de la primera colonia eterna, Sui-San. Prosiguió con sus experimentos para aumentar el número de eternos, ya fuera de manera biológica o tecnológica. Con Sui-San tendría dos hijos, el hedonista, alegre y mujeriego Eros y Thanos, afectado por el síndrome desviante que le hizo tener rasgos distintos.

Se dice que cuando Sui-San vio por primera vez a su hijo, enloqueció e intentó asesinarle. A pesar de esto, la juventud de Thanos fue relativamente normal, destacando por su inteligencia e interés por la ciencia, hasta que conoció a una niña que empezó a ayudarle con su aversión a hacer daño a seres vivos. Poco a poco fue perdiendo el miedo y empezó a experimentar con pequeños animales. Para cuando llegó a la adolescencia, estos experimentos, con la ayuda de la niña que se había convertido en su amiga y confidente, se fueron extendiendo a otros titanes. Poco a poco Thanos descubrió que disfrutaba asesinando y al mismo tiempo se fue enamorando de su amiga, que sin embargo rechazó sus avances.

Finalmente, para averiguar el secreto de su genética, acabó secuestrando y asesinando a su madre, tras lo cual abandonó Titán y se embarcó en una tripulación de piratas espaciales, con los que fue viajando por diferentes planetas asesinando indiscriminadamente y tomando diferentes parejas con las que tendría descendencia, siempre a la búsqueda de encontrar algo que le hiciera sentir de nuevo. De regreso a Titán, se encontró con su antigua amiga, que le exigió para corresponderle que le demostrara que sólo le pertenecía a ella, para lo que tendría que encontrar y asesinar a sus parejas y su descendencia, lo que le llevó a una cruzada de destrucción por todos los planetas por los que había pasado. Además, empezó a experimentar con su propio cuerpo, lo que le fue otorgando diferentes poderes. Su antigua amiga se convirtió en su compañera durante estos viajes, pero para llegar a ser su amante le puso la condición de que debería convertirse en un dios destructor, por encima de todos. Poco después Thanos descubrió que nadie más de su tripulación era capaz de verla, a lo que ella se reveló como la manifestación de la propia Muerte. Enloquecido tras esta revelación, Thanos aceptó lo que le proponía y regresó a Titán, arrasando la colonia y enfrentándose personalmente a su padre, al que derrotó, pero dejó vivo para que pudiera observar sus actos.

Tras esto, comenzaría la larga etapa en la vida de Thanos en la que su objetivo consistiría en amasar la mayor cantidad de poder posible, para continuar con sus actos de destrucción que le hicieran merecedor de su amada. Una vez hubo amasado un ejército, su mirada se posó en el planeta Tierra, donde supo que unos científicos habían creado un objeto de poder casi infinito llamado el cubo cósmico. Después de robarlo, se convirtió casi en un dios y se enfrentó a los Vengadores y al Capitán Marvel, que se convertiría en su primer gran enemigo. Engañado por este último, Thanos tuvo que regresar a su nave nodriza, la Santuario II, donde descubrió que la Muerte le había abandonado por su fracaso.

Fue entonces cuando concibió el plan para recuperarla, con el regalo de la muerte de todo ser viviente del cosmos. Para ello emprendió la búsqueda de unos artefactos aun más poderosos que el cubo cósmico, las gemas del infinito. A lo largo de la galaxia fue recuperando cada una de las gemas hasta que sólo le faltó una, la del alma, en poder de un ser llamado a convertirse en su archienemigo y mayor aliado, Adam Warlock. Observando a su rival, descubrió que este estaba destinado a convertirse en el Magus, un ser que rivalizaría con el propio Thanos en cuando a poder y capacidad de destrucción. Con la capacidad de realizar viajes en el tiempo, el Titán Loco empezó a trastocar cosas para prevenir la aparición de Magus. Uno de estos actos consistió en rescatar a una niña llamada Gamora, a la que criaría junto a su hija adoptiva Nébula. Otra cosa que también hizo fue aliarse con Warlock contra Magus, pero drenando la energía de su gema alma sin que lo supiera.

Con el poder de las seis gemas, Thanos construyó una gema sintética que le permitiera canalizar la energía de todas, lo que instaló en un arma con la que provocar que soles pasaran a estado nova. Gamora descubrió su plan e intento detenerle, pero este la asesinó, al igual que al compañero de Warlock, Pip el troll. Los Vengadores, junto al Capitán Marvel y Warlock se enfrentaron a Thanos a bordo de la Santuario II y tras revivir, Warlock convirtió en una estatua de piedra al Titán, desbaratando sus planes y condenándole a una existencia en la que nunca alcanzaría su objetivo, la muerte.

Tras ser resucitado por la Muerte, Thanos se embarcó en una búsqueda que le llevaría a descubrir los verdaderos poderes de las gemas del infinito, más allá de las baterías generadoras de energía como las había utilizado anteriormente. Utilizando su inteligencia, Thanos volvió a conseguir las gemas de aquellos que las tenían en su poder en ese momento, los primigenios de la galaxia. Cuando las tuvo todas, las junto en un guantelete de su creación, que le permitiría canalizar su energía. Con un poder infinito, reunió a los héroes de todo el universo y se dedicó a jugar con ellos, aplicando todo su sadismo. Sin embargo, se olvidó de Nébula, a la que había dejado previamente en un estado semi comatoso. Ésta aprovechó un momento de descuido del Titán para arrebatarle el guantelete y utilizarlo en su contra. Finalmente sería Adam Warlock el que se haría con la posesión del guantelete, utilizando su poder para restaurar lo que había hecho Thanos y terminar con el conflicto.

Durante su periodo de omnipotencia en posesión del artefacto, Warlock se dio cuenta de que Thanos, probablemente se había saboteado a sí mismo al no estar completamente convencido de sus acciones y decidió otorgarle una oportunidad para redimirse. Así, cuando las entidades cósmicas le obligaron a renunciar al poder del guantelete y formó la guardia del infinito para custodiar cada una de las gemas, en secreto confió en el titán para que se hiciera cargo de la gema de la realidad.

El tiempo daría la razón a Adam, dado que se sucederían una serie de crisis en las que Thanos demostraría ser un formidable aliado y protector de la galaxia. La primera de estas crisis vino de la mano del reverso oscuro de Warlock, Magus. Aunque habían prevenido la línea temporal que convertiría a Adam en el tirano, durante el tiempo en que éste tuvo los poderes del guantelete, había decidido que necesitaba estar libre de pasiones para ejercer correctamente su poder, lo que le hizo expulsar su lado malvado de sí mismo, y que tomó la forma de un nuevo Magus. Gracias a Thanos lograron acabar con él y volver a la normalidad por un tiempo.

Pero igual que había expulsado su lado malvado, Adam también había expulsado su lado bondadoso, que tomó la forma de un ser conocido como la Diosa, que engañó y dominó a los héroes más religiosos para que se unieran a su cruzada por el bien… al precio que fuera necesario. Una vez más Thanos jugó un papel fundamental en la derrota de la Diosa, gracias a su inteligencia, poder y falta de escrúpulos a la hora de establecer un trato con Mephisto, por ejemplo, aunque el titán en realidad logró engañar al viejo diablo y batirle en su propio juego.

Thanos llegaría incluso a ayudar a recuperar a un enloquecido Thor, que estaba sembrando el caos. También se enfrentó a seres como el hijo de Galactus y otra serie de amenazas cósmicas, aunque el aburrimiento empezaba a hacer mella en el titán. Durante uno de estos eventos, el titán enfureció a la Muerte, que le condenó a permanecer siempre fuera de su reino, convirtiéndole en un verdadero inmortal. En otro de estos eventos tuvo que lidiar con una serie de clones suyos, creados como experimentos, cada uno con uno de sus diferentes poderes llevado al límite. Estos habían sido despertados por accidente y, con la mentalidad antigua del titán, buscaban la destrucción total. Una vez más, junto a Warlock y varios héroes de la Tierra, lograron evitar la catástrofe.

Más adelante su camino acabaría conduciéndole a ser encarcelado en la prisión galáctica conocida como las Kyln, junto a otros como Peter Quill, StarLord, o Gladiador, de la guardia imperial Shi’Ar. Este fue el momento en el que comenzó la primera oleada aniquiladora, con el soberano de la Zona Negativa, Annihilus, al mando de un ejército invasor imparable. Aburrido de la repetición continua de los ciclos de vida y muerte que había tenido, Thanos decidió ponerse del lado de Annihilus para ver lo que supondría un cambio. Ayudó al invasor a capturar a Galactus y convertirlo en un arma imparable hasta averiguó que en realidad los planes de Annihilus consistían en arrasar tanto este universo como la Zona Negativa. El titán decidió entonces detener al invasor, liberando a Galactus, aunque no logró acabar el proceso antes de que Drax, creado para ser su némesis, cumpliera su objetivo y atravesara su pecho arrancando su corazón. A pesar de su fallecimiento, el proceso se completó y un liberado Galactus arrasó la oleada aniquiladora, mientras que el humano Richard Rider, último de los centinelas Nova, acabó con la vida de Annihilus.

Thanos sería revivido por un enloquecido Adam Warlock, que lo puso en una de sus vainas regenerativas. Al emerger, se encontró en medio del conflicto entre los guardianes de la Galaxia y Magus, que estaba utilizando la Iglesia Universal de la Verdad como sacrificios para abrir más aun la brecha en la realidad que había provocado una guerra galáctica, la Falla, que comunicaba con el Cancerverso, un universo donde no existía la muerte y todo estaba sometido a las entidades demoníacas llamadas Los de Muchos Ángulos. Como avatar de la Muerte, los Guardianes obligaron a Thanos a acompañarlos en su incursión a ese universo con el objetivo de cerrar la falla y prevenir la invasión.

Una vez en el Cancerverso, Thanos fue asesinado otra vez por Drax, pero como nada podía morir allí, regresó inmediatamente. Finalmente, los héroes y Thanos acabaron enfrentados al avatar de la vida de aquel universo, el Capitán Marvel. Engañando a Mar-Vell fingiendo sometimiento, Thanos consiguió que éste realizara un ritual que invocó a la Muerte a aquel lugar, que procedió a restaurar el equilibrio. Sin embargó volvió a rechazar a Thanos, que culpó a Starlord de aquello, jurando destruir todo lo que era importante para él. El poder de la Muerte, sin embargo, no fue suficiente para destruir el cancerverso, al no pertenecer de manera nativa a aquel lugar. Los héroes consiguieron escapar mediante el poder de un cubo cósmico, quedando atrás Nova, Starlord y Thanos, en una lucha por el poder. Sería el Nova el que acabaría haciéndose con el cubo, utilizando su poder para retornar a Peter y Thanos a su universo y permaneciendo él para mantener la brecha cerrada.

Aunque su camino empezaba a tomar otros derroteros, recuperando su faceta de conquistador, aun tuvo tiempo de una última aventura junto a Adam Warlock, en la que otro universo se fusionó con el de ellos. Las cosas se complicaron y el Warlock original pereció, al igual que el Thanos del otro universo, mientras que el Thanos original quedó atrapado en un universo vacío, del que sólo logró escapar mediante suicidio. Por otra parte, el Warlock alternativo había absorbido la energía de su universo, convirtiéndose en una fuente de poder imparable. Esto fue detectado por el tirano de la Zona Negativa, Annihilus, que consiguió capturarle para utilizarle para sus propios fines. Después de resucitar en el universo correcto, Thanos acudió a liberar al Warlock alternativo que, finalmente, se acabó convirtiendo en la entidad cósmica conocida como el Tribunal Viviente. Con el poder recién adquirido, este ser devolvió a la vida al Warlock original.

Desde entonces, Thanos cambió por completo su modo de operar. Reconstruyó su grupo de lugartenientes, la Orden Negra, y aprovechando la ausencia de los Vengadores, se lanzó a la conquista de la Tierra, con el objetivo de conseguir la gema del tiempo. Su primer gran enfrentamiento sería con el líder de la raza de los Inhumanos, Rayo Negro, en la fortaleza de Attilan, ubicada en aquel momento sobre Nueva York. Intentando destruir al titán y salvar a su raza, el monarca hizo explotar la fuente ancestral de los poderes Inhumanos, las nieblas terrígenas. Esto tuvo graves consecuencias, formando una nube que recorrería el mundo transformando a todos aquellos que tuvieran ancestros Inhumanos. Thanos sobrevivió a la explosión y tras derrotar a Rayo Negro, acudió a Wakanda, donde sus lugartenientes le indicaron que se encontraba la gema del tiempo. Sin embargo, una vez allí, otro tema mas urgente para el titan llamó su atención. Otro de sus lugartenientes, Fauces Negras, había encontrado en la colonia inhumana de Orollan, que había permanecido oculta durante muchos años, a uno de los hijos de Thanos, con el nombre de Thane. Sin embargo, éste fue manipulado por Fauces Negras contra su padre, utilizando su poder contra el titán, que acabó encerrado en un bloque de ámbar.

El grupo de grandes héroes llamados los Illuminati, trasladaron el bloque a una prisión, donde permanecería hasta que fue liberado por Namor. El universo se hallaba sumido en el caos, con todas las realidades colisionando unas con otras en fenómenos que se denominaron incursiones. Tras muchos intentos, los Illuminati, de los que formaba parte Namor, llegaron a la conclusión de que el único modo de prevenir la destrucción de lo universos en colisión era destruir por completo cada Tierra alternativa que se acercara. Siendo incapaces de cometer semejantes genocidios, aunque fuera por salvar al menos una de las Tierras, los Illuminati se rindieron, por lo que Namor fundó su propio grupo sin tantos escrúpulos, la Cábala. Inmediatamente Thanos se hizo con el control del grupo, a pesar de los intentos de Namor y se dedicaron a acometer su tarea de salvación con entusiasmo. Al cabo del tiempo, Namor no pudo soportar la crueldad con la que se comportaba su grupo y pidió ayuda a sus antiguos aliados Illuminati. Estos le ayudaron, aunque como castigo, Pantera Negra y Rayo Negro le abandonaron para morir junto a la Cábala. El grupo logró sobrevivir por una casualidad, dado que se produjo una doble incursión y lograron escapar a la tercera Tierra que se acercaba.

El final de las incursiones sólo llegó cuando todo dejó de existir, salvo un mundo de retazos construido por el ahora omnipotente archienemigo de los Cuatro Fantásticos, el Doctor Muerte, donde reinaba como Dios y Emperador. Thanos y la Cábala lograron sobrevivir y llegaron a jugar un papel importante en la derrota de Muerte, aunque Thanos fue destruido en un enfrentamiento directo con él. Tras el final de todo este episodio y la reconstrucción del cosmos, Thanos fue devuelto a la vida, pero exiliado fuera del universo, abandonado en la nada, hasta que aprovechó un portal abierto por Galactus para regresar. No tardaría mucho en volver a la Tierra, pero allí encontró esperándole a un gran grupo de superhéroes, que habían sido avisados por un inhumano con poderes precognitivos. Durante la batalla, consiguió causar heridas gravísimas a Hulka y asesinar a James Rhodes, Máquina de Guerra, antes de ser reducido y encarcelado. Tras varios intentos de fuga, finalmente conseguiría huir cuando estaba siendo transportado a una prisión galáctica.

Debilitado por una misteriosa enfermedad, se enfrentó de nuevo a su hijo, que en aquel momento se había hecho con el poder de la Fuerza Fénix y de nuevo fue derrotado, quedando atrapado en las ruinas de Titán. De allí sería rescatado por Eros y Nébula, que buscaban ayudar para derrotar a un desatado Thane. Junto a ellos, viajó a un lugar mítico, la Forja de los Dioses, donde logró superar la prueba necesaria para recuperar sus poderes. En aquel lugar se enfrentó a Thane una vez más, pero en esta ocasión la propia Forja arrebató el control de la fuerza Fenix a Thane y el titán logró derrotar a su hijo. De allí partió de nuevo a la conquista, haciéndose con el control del planeta natal de los alienígenas Chitauri. Sería en el trono de aquel lugar, rodeado de sus nuevos sirvientes, donde le encontraría una enloquecida Gamora, a la búsqueda del poder de las gemas del Infinito, que con una gigantesca espada le atravesó el pecho y después le cortó la cabeza.

Su regreso sumiría la Galaxia en el caos, puesto que, gracias a un plan en caso de su muerte, puso en conocimiento de muchos que su conciencia regresaría en otro cuerpo de salvaguarda. Creyendo que se trataría de su hija adoptiva, Gamora, diferentes facciones intentaron asesinarla mientras que otras la protegían. Todo era un engaño, puesto que en realidad el cuerpo que iba a utilizar era el de su hermano, Eros, sin que éste fuera consciente de ello, pero no logró completarse la resurrección y falleció de nuevo.

Sin embargo, con el titán, su regreso sólo era cuestión de tiempo. Esta vez, se produjo de una manera extraña. Mediante las manipulaciones de Phastos, uno de los Eternos, Thanos fue introducido en el ciclo de regeneraciones de la Máquina, el sistema que les permitía volver más allá de la muerte. Aunque con buenas intenciones, Phastos había descubierto algo que desconocían el resto de eternos y es que cada vez que la máquina traía de vuelta a un eterno, era a cambio de la vida de un humano, con lo que decidió detener algo que le parecía aborrecible. Bajo sus instrucciones, Thanos empezó a asesinar Eternos, para que Phastos pudiera utilizar la distracción para sabotear el sistema, hasta que todo se descubrió por los otros eternos y Thanos escapó, retomando sus propios planes.